Decimosegunda Edición
Año 9 Primer Semestre 2018
Editorial
Editorial
Con gozo publicamos en este número de Ventana Teológica los artículos del doctor Christopher Hays y de la teóloga Erika Parra y de la estudiante de teología Yaily Gambín, así como la transcripción de la primera conferencia del seminario dictado por la doctora Dana M. Harris del Trinity Evangelical Divinity School como profesora visitante en la FUSBC, y la reflexión pastoral del doctor Ricardo Gómez Pinto. Publicamos estos trabajos, que reflejan el intenso y vigoroso quehacer teológico de la Fundación Universitaria Seminario Bíblico de Colombia, con la esperanza de aportar a la continua edificación de la iglesia de Jesucristo en Colombia, particularmente de sus pastores y líderes laicos, y de contribuir con reflexión teológica sesuda a la comunidad académica interesada en la teología.
El doctor Hays regresa a Ventana Teológica con un artículo sobre la ética neotestamentaria de la riqueza, publicado inicialmente como “New Testament Wealth Ethics in the Twenty-First Century: Some Constructive Considerations on Personal Piety and Public Progress” en la revista Evangelical Quarterly 88 (2016/2017) y ahora publicado aquí con la debida autorización de la editorial original. Este artículo se pregunta cómo tomar en serio las enseñanzas de Jesús en cuanto a la riqueza y la pobreza en una economía global, en la que los mercados y el sector financiero podrían apoyar de manera significativa al florecimiento económico de los necesitados. Se enfoca principalmente en el Evangelio según Lucas que registra la afirmación de que los discípulos de Jesús tienen que dedicar todos sus recursos al Reino (cf. Lc 14:33). También investiga la pregunta sobre cómo apropiarse constructivamente de esta ética neotestamentaria para la sociedad contemporánea y brinda algunas sugerencias sobre cómo transponer esta ética neotestamentaria a la esfera pública. Finalmente explora los conceptos organizadores del arrepentimiento, la santificación, el doble mandato de amor y la diversidad vocacional para empoderar al pueblo de Dios a perseguir el imperativo ético neotestamentario de dedicar todas sus posesiones al Reino.
“El lamento en el mundo bíblico y en otras culturas alrededor del mundo” es el título del artículo de la teóloga Érika Parra y de la estudiante de teología Yaily Gambín, asesoradas por el profesor Milton Acosta. En el contexto de una nación como la colombiana, tan asediada por múltiples dinámicas perversas que generan dolor, sufrimiento y desesperanza, este artículo sobre el lamento amerita una consideración profunda por parte de nuestros lectores. Las autoras animan a la iglesia cristiana en Colombia a incorporar el lamento en su liturgia, no como una expresión de incredulidad sino, por el contrario, apelando a Dios, el rey eterno con poder para restaurar y renovar, y a la realidad de un Dios que escucha atentamente a su pueblo. A partir del acercamiento a algunos textos bíblicos, particularmente el libro de Lamentaciones y el ejemplo de Jesús, las autoras cuestionan la tendencia a esconder el dolor y el sufrimiento. Ellas registran también algunos puntos en común del lamento en el mundo bíblico con cuatro usos del lamento en otras culturas del mundo de hoy: los judíos, algunas comunidades cristianas en Europa, los haitianos y la comunidad chocoana en Colombia. Concluyen que como quiera que el lamento es una forma permitida y legitimada por Dios para expresar el dolor, la iglesia debería incluirlo en su adoración personal y en la comunitaria.
La doctora Dana M. Harris, como profesora visitante en la FUSBC, dictó el seminario “El reposo prometido ayer, hoy y para siempre en la epístola a los Hebreos”, entre el 3 y el 6 de abril pasado. Nos complace publicar la transcripción de sus conferencias, comenzando con la primera conferencia de introducción al reposo prometido en Hebreos. Ello explica que estos textos no tengan citas ni resúmenes.
Harris muestra algunas de las contribuciones únicas de Hebreos en el conjunto del corpus neotestamentario como son los casos de las numerosas instituciones del Antiguo Testamento que menciona, incluyendo el sacerdocio levítico, los sacrificios levíticos, el pacto mosaico y el tabernáculo, y del enfoque sostenido en la exaltación de Cristo, pero también en su humanidad y su vida terrenal, mostrando además, cómo Cristo se corresponde con y supera cada una de las instituciones del Antiguo Testamento que el autor de Hebreos menciona. Aclarando que los asuntos introductorios del estudio exegético de los textos bíblicos afectan de manera importante su interpretación y su aplicación, Harris explora estas cuestiones respecto a la epístola de Hebreos, como los de autoría, audiencia, ocasión y el propósito de urgir a la perseverancia en la fe. La parte dos de la transcripción desarrolla la clave para la comprensión de esta epístola que se encuentra en Hebreos 1:1-2a y señala que el Hijo (Jesucristo) es la revelación plena y final que devela completamente los planes y propósitos de Dios. Harris utiliza la herramienta metodológica conocida como “trayectoria tipológica” para explicar cómo el autor de Hebreos se apropia y desarrolla algunas tipologías ya establecidas dentro del Antiguo Testamento para mostrar su culminación escatológica en Cristo.
Finalmente, el doctor Ricardo Gómez Pinto presenta una reflexión pastoral titulada “Lucha por amor”, a partir de las vidas de Jacob y Lea, registrada en Génesis 29:15-35, en donde se destaca el peligro de desilusión de tratar de llenar los vacíos e inseguridades más profundos de la vida con un cuestionable y falaz “amor verdadero”. Gómez explora algunos de los problemas más íntimos de Jacob y de Lea en el contexto de los propósitos de Dios de bendecir las familias de la tierra a partir de Abraham y su descendencia. También identifica el desespero falaz de Jacob de tratar de llenar sus vacíos con la belleza desbordante de Raquel, en medio de intrigas y engaños, y en el contexto cultural del Medio Oriente en los tiempos de los patriarcas del pueblo de Israel. La insatisfacción termina cuando la búsqueda se dirige hacia la presencia de Dios y se materializa en Judá que significa “gracia”; momento en el que la reacción de Lea se dirige hacia Dios con la declaración “esta vez alabaré al Señor”.
Con un gozoso deseo a favor de una lectura provechosa y edificante.